Reseña: Éramos Mentirosos, E. Lockhart

Éramos mentirosos
Del título original We Were Liars
E. Lockhart
Editorial Salamandra
Traducción de Montse Batista
283 páginas
ISBN: 978.84.16555.00.0
14,50 €
Libro autoconclusivo

Una isla privada. Una ilustre y conocida familia de Nueva Inglaterra. Un grupo de cuatro amigos —los Mentirosos— cuya amistad se vuelve destructiva. Una rebelión. Un accidente. Un secreto. Mentiras y más mentiras. Amor verdadero. Y, por fin, la verdad.

Ésta es la bellísima y terrible historia de una familia perfecta que se sostiene sobre pilares de peligrosa fragilidad. A lo largo del relato se van desvelando las piezas de un rompecabezas que formarán un mosaico de personajes fascinante, donde los prejuicios y el egoísmo son los peores enemigos de la armonía y la felicidad.

Esta es una historia muy particular. Algo fuera de lo común que no se ve todos los días en la literatura juvenil. Es una historia de la que es mejor que no sepas nada y en la que debes adentrarte en el más pleno desconocimiento. Porque... ¿sabes qué? Nunca sabes qué puedes encontrar. Qué es cierto y qué no. 

Eramos mentirosos tiene como voz protagonista a Cady. Cady pertenece a una familia bastante singular. No son excesivamente raros, pero sí conservadores y cada uno de ellos tiene una particularidad. El egoísmo y la ambición están a la orden del día entre los Sinclair y, como se suele decir, siempre pagan justos por pecadores. A los cuatro primos, y roles principales, les llaman los Mentirosos y no es difícil averiguar el por qué en cuanto comienzas a leer la novela. Sin embargo no diré más, porque lo interesante es ahondar cada uno por sí mismo. 

Los personajes están muy bien construidos y cada uno tiene un papel perfectamente definido. Su rol en la historia queda claro y sus personalidades sacarán de quicio al lector e incluso a los demás personajes en cualquier momento. ¿Qué les lleva a actuar así? Lo más extraño que me ha resultado de todo el libro es esa historia de amor adolescente entre Cady y Gat. No me la he creído en ningún momento e incluso he sentido que era prescindible, nada necesaria para la novela.

Algo a destacar es la narración de Cady en esta historia. Ya no solo por esos capítulos cortos que te enganchan y haces que no puedas parar de leer, sino cómo la protagonista nos cuenta las cosas. Es increíble su forma de transmitirnos su visión del mundo y sus sentimientos con sus juegos de palabras.

Bienvenidos a mi cráneo. 

Un camión me pasa por encima de los huesos del cuello y la cabeza. Las vértebras se me rompen, los sesos me estallan y rebosan. Un millar de linternas me brillan en los ojos. El mundo se inclina.

Éramos mentirosos es un libro diferente, original, lleno de misterio y dolor que nos planteará la duda de qué es verdad y qué no lo es. Una novela que no pasa desapercibida y que no deja indiferente a nadie. ¿Estás listo para entrar?

Bienvenidos a la familia Sinclair. 

Aquí no tenemos delincuentes.

No tenemos adictos. 

No tenemos fracasados.